¿Fungible o no fungible? he ahí la cuestión...

No sé que me pasa que últimamente mire donde mire sólo veo dos clases de cosas: “fungibles” o “no fungibles”… y es que (agarraros que vienen curvas): ¡Estamos de Inventario!.

Cada departamento tiene que hacer un inventario del material no fungible con el que cuenta… ¿Parece sencillo no?... nada más lejos de la realidad… han tenido que hacer hasta una reunión del claustro para explicarlo:

- Pero… ¿exactamente que es material fungible? – pregunta un profesor contrariado…

- Pues material fungible es aquel material que se consume con el uso – contesta la secretaria del centro.

“Parece sencillo”… pienso yo… ¡ja!...

- Pero… entonces ¿una grapadora es fungible? – pregunta otro profesor

- No, una grapadora no es fungible. Las grapas en cambio si son fungibles – contesta la secretaria pacientemente.

- ¿y las tijeras?¿las tijeras son fungibles?

- No, las tijeras no son fungibles…

- A ver si me queda claro – dice un tercer profesor – entonces ¿pretendéis que hagamos un inventario y que pongamos también las tijeras y las grapadoras?... no será mejor que inventariemos únicamente el mobiliario grande y que nos olvidemos del pequeño…

- No… - la secretaria comienza a perder la paciencia – hay que inventariar todo el material fungible

- ¿y las pipetas? – pregunta la de química - ¿las pipetas son fungibles?

- No… - contesta la secretaria – las pipetas no son fungibles

- Pero vamos a ver… yo tengo un inventario hecho en el 2004 y en ese inventario pone que en el departamento había una grapadora… la grapadora que hay ahora no es la misma que había entonces porque aquella se rompió… ¿qué hago?: ¿Pongo que hay una grapadora o pongo que hay dos pero que una se ha roto?

- Pon que hay una… - la secretaria no ha terminado de contestar cuando otro profesor está haciendo una nueva pregunta…

- ¿y los tubos de ensayo? – la de química parece indignada – ¿los tubos de ensayo son fungibles?

- ¿y los libros de texto? – pregunta otro – en mi departamento hay montones de libros de texto que nos dan las editoriales y que no usamos… ¿también hay que inventariarlos?

- No, los libros de texto que regalan las editoriales no hace falta inventariarlos porque cambian cada pocos años – contesta la secretaria…

Y con esta respuesta genera más lio…

- entonces, que me quede claro… -dice la de lengua – hay que inventariar todo menos los libros…

- yo creo que es mejor inventariars sólo las mesas y las sillas… vamos, lo grande y si acaso algún ordenador – alega otro.

-¿me estás diciendo que los libros son fungibles y los tubos de ensayo no? – la de química se calienta…

Tras un buen rato discutiendo se llega a la conclusión de que la secretaria debe mandar un mail a todos los jefes de departamento explicando exactamente lo que hay que inventariar, porque al parecer con la definición de “material no fungible” no queda claro.

A la salida una profesora a la que apenas conozco me pregunta:

- ¿Qué?... ¿Qué tal?... ¿Qué te ha parecido tu primera reunión?

Me sale del alma decir:

- Que sois peores que los alumnos… - … y me quedo tan tranquila…

Lo curioso es que ella sonríe, aunque no era esa mi intención, y contesta:

- Que razón tienes…